Mensaje de Bienvenida

martes, 13 de enero de 2015

No es la caricia, es quien te toca...




El tacto de su mano sobre su pierna al principio le producía cosquillas. Ahora, sin embargo, se sentía protegida y lo que es más, que el mundo ya podía seguir dando vueltas, que ella sentía que  el rompecabezas de su vida había ido girando sus piezas a una velocidad vertiginosa y que por fin, todo estaba bien, después de tanto tiempo.
Sonrió  y se abrazó a su silueta mientras  daba gracias al cielo por tenerle cerca.